jueves, octubre 3

Ayuso saca pecho del escaño arrebatado en Madrid que complica la investidura de Sánchez

El escaño que ha arrebatado el PP al PSOE en Madrid con el recuento del voto CERA da una vuelta de tuerca al panorama de Pedro Sánchez para lograr la investidura, que deberá o conseguir el ‘sí’ de Junts o bien el apoyo de Coalición Canaria y la abstención de los posconvergentes. De este nuevo escenario saca pecho la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que se reivindica como precursora de que haya sido posible. Fuentes de los populares en la comunidad relatan que fue ella quien desde la misma noche electoral del pasado domingo dio la orden de «pelear hasta el final» ese diputado que se había quedado a un estrecho margen de 1.700 votos dado que era «muy importante en el equilibrio de fuerzas y en la gobernabilidad de España».

El encargo, según esas mismas fuentes, lo recibió el secretario general del partido en Madrid, Alfonso Serrano, después de que Alberto Núñez Feijóo hubiera encajado una victoria que tenía sabor a derrota por un PSOE que logró resistir ante las expectativas que auguraban mayoría absoluta de la derecha. El líder del PP se asomó ante una militancia que no ahorró vítores en favor de Ayuso, a quien algunos barones reprocharon entre bambalinas que «no había movilizado suficiente voto» en su comunidad. Ahora, con el recuento definitivo sobre la mesa, busca cobrarse la factura a la interna.

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El relato del partido en Madrid es que la instrucción que dio Ayuso es inédita: revisar todas las actas de todas las mesas electorales de Madrid, «voto por voto», para contrastarlas con las del Ministerio del Interior en búsqueda de posibles errores. Se montó un equipo de 30 personas para ello y en tres días se detectaron 431 votos a favor del PP por «errores de transcripción de los datos» durante el escrutinio, una diferencia que quedaba a expensas del recuento del voto exterior, que finalmente ha decantado la balanza hacia este diputado de más para los populares.

«El PP de Madrid logra ese escaño 16 en el que el pasado domingo confiaba ya la presidenta madrileña», presumen fuentes del partido, que se recrean en las «sonrisas y satisfacción» de los implicados en ese proceso de recuento cuando comprobaron, ya de madrugada, que los socialistas perdían ese representante.