La Fiscalía azerí ha informado este jueves que las Fuerzas Armadas del país atacaron por error un vehículo militar de las fuerzas de paz rusas desplegadas en Nagorno Karabaj en el marco de la última escala de tensiones entre Azerbaiyán y Armenia en la región separatista.
De acuerdo con un comunicado del Ministerio Público de Azerbaiyán, un grupo militar azerí disparó por error contra el vehículo ruso «debido al terreno difícil y las condiciones climáticas brumosas y lluviosas».
A consecuencia de este ataque, perpetrado el miércoles, cinco militares rusos resultaron muertos. Más tarde, el mismo día, grupos armados armenios dispararon también contra un destacamento ruso, dejando un militar muerto y otro herido.
«Por ambos hechos, el Fiscal General de Azerbaiyán ha iniciado una causa penal con arreglo a los artículos pertinentes del Código Penal, cuya investigación se ha encomendado al Departamento de Investigación de la Fiscalía General», ha informado el Ministerio Público en un comunicado.
Así las cosas, la Fiscalía azerí ha confirmado una conversación telefónica con las autoridades rusas, en la que Bakú ha trasladado «su más sentido pésame» por lo ocurrido, y ambas partes han acordado desarrollar una «investigación exhaustiva del incidente y en estrecha colaboración».
El Ministerio de Defensa ruso confirmó el miércoles que varios de sus militares desplegados en Nagorno Karabaj habían fallecido tras un ataque contra el vehículo en el que viajaban, si bien entonces las autoridades rusas no apuntaron a posibles autores.
El incidente tuvo lugar cuando los militares regresaban de un puesto de observación en la zona de Dzhanyatag. El automóvil fue atacado con armas pequeñas, según la nota oficial de la cartera de Defensa rusa.
Las autoridades de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj y el Gobierno de Azerbaiyán confirmaron el mismo miércoles la entrada en vigor del alto el fuego, un día después de que las fuerzas azeríes iniciasen una operación que se ha saldado con decenas de fallecidos.
Rusia, aliado clave de Armenia durante años, mantiene sobre el terreno una fuerza de paz que tiene su origen precisamente en otra escalada, ocurrida en 2020. El Kremlin ha señalado que la reciente escalda de tensiones en Nagorno Karabaj es «un asunto interno de Azerbaiyán».