martes, enero 21

Los 3 pasos para elegir a los presidentes de las diputaciones provinciales

A partir de los medios del siglo XIX, España se organiza en provincias, una unidad administrativa basada en Francia, los departamentos, y que nace con el espíritu jacobino que espera para Francia y, también, para parte de España. Se decidió, que las provincias fueran el poder central de control y sistema de inoculación, único e indiscutible, en el territorio. Dice la leyenda que, incluida, la ubicación geográfica de cada unidad, de cada provincia, corresponde al tiempo que un destacamento del ejército (a caballo) podía demorar desde la capital de la provincia hasta el punto más lejano en un solo día. , al final sofocar cualquier atisbo de rebelión o sedición. Con estos antecedentes es evidente que no es una figura que despierte pasiones entre los nacionalistas y separatistas catalanes. Las diputaciones no son más que el gobierno de estas provincias. En el caso catalán, el de Barcelona, ​​con un presupuesto de 1.000 millones de euros, es la tercera administración catalana, siempre, sin embargo a la sombra de, tanto la Generalitat como el Ayuntamiento de Barcelona.

A rueda de los municipios

Las diputaciones provinciales son órganos de elección indirecta. Se decide que los electores no voten por ningún candidato del pleno provincial, hasta que para su composición se tomen como base los resultados de las elecciones municipales. El número de representantes de cada delegación provincial se determina en función del número de vecinos de cada provincia. Lo mismo pasa con el ayuntamiento, por lo que Barcelona dejó de tener 43 concesiones, cuando la población superó los 1,7 millones de habitantes, hasta las 41 actuales. Así, en una demarcación de hasta 500.000 habitantes (Lleida tiene alrededor de 450.000), el pleno cuenta con 25 escaños; hasta un millón de personas (el caso tanto de Girona, con 780.000, como Tarragona, 840.000), 27; entre uno y tres millones , 31. Y más de 3,5 millones (Cuenta Barcelona con casos 6)51

Partidos políticos organizados en partidos judiciales

noticias de relación

Las disputas no son circunscripciones únicas, hasta que se dividen en los partidos judiciales, prueba inequívoca de que el origen de la provincia fue, efectivamente, de control y castigo. En el caso de la diputación barcelonesa hay 14 partidos, entre los que responden a los 51 diputados según la población. El partido judicial con más diputados es el de Barcelona (18), seguido de L´Hospitalet de Llobregat (6), sabadell (4), Terrassa (4), Granoller (3), Mataró (3), San Feliú de Llobregat (3), manresa (2), arenys de mar (2), Vic (2), Berga (1), Igualada (1), Vilafranca del Penedès (1) un Vilanova i la Geltrú (1).

Relación de fuerzas en los ayuntamientos

Una vez constituidos todos los regidores, se decidirá, lo que sucederá en una semana y donde también se elegirá al alcalde, la junta electoral de la zona elabora un informe de todos los partidos políticos que alguna vez ha obtenido dentro cada partido judicial. Aplicando la ley d’Hondt, los cebos se reparten entre los nombres de la lista. Luego son los partidos quienes se nombran, de entre sus concejales, quienes irán al pleno provincial. Se resuelve, que el acto del diputado provincial, y sus dietas de asistencia a los plenos mensuales, pasan a formar parte del mecanismo con que cuentan las partes para premiar, castigar o simplemente redondear el sueldo de aquellos a quienes decidan las respectivas cúpulas. Formado en pleno, el proceso de elección del presidente de cada diputación es similar al que se sigue en las Cortes Generales o en el Congreso para designar al presidente del gobierno respectivamente.