domingo, mayo 18

Planas vincula a Bruselas con las perdidas ‘clusulas espejo’ y los agricultores mantienen el pulso al Gobierno en la calle

«El jefe de la revisión de los Ministros de Agricultura europeos». como bautizar un Luis Planas el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans, en momentos generales de la negociación de la última reforma de la Política Agraria Común (PAC), germen de la actual movilización del campo, que exige contra la atención ambiental y la carga regulatoria y burocrática. La historia fue revelada por su Ministro durante un debate informativo de los últimos meses y sirve como preludio de la reunión del Consejo de Ministros de Agricultura que se celebra este mes en Bruselas.

«Te lo digo en privado, no intentes decirlo en público», dice Planas, para asegurarse de que aceptas el texto de cabecilla de la rebelión ministerial del campo europeo «con mucho honor». «Pero no porque estuviera en contra Pacto Verde o la estrategia De la Granja a la Mesa, absolutamente. ¡Cómo voy a conseguirlo, siendo miembro de este Gobierno! Simplemente, porque digo que lo que hay que hacer, hay que hacerlo de la mano de los agricultores y cultivadores y todos los objetivos están establecidos de forma clara y con fases y cronogramas que sean posibles”, afirmó el ministro.

Tres días después de aquella ardua negociación, los líderes agrícolas europeos están citados este mes para abordar conjuntamente «la respuesta y las respuestas estructurales a la actual situación de crisis del sector agrícola», según el orden de los datos. El encuentro coincide con la celebración de un multitudinario restaurante en Madrid, esta vez convocado por las tres organizaciones profesionales agrarias más representantes: Asaja, UPA y Coag.

Ahora tienes que mover tu querida carta en este momento, atendiendo al más alto nivel. Su propio Primer Ministro, Pedro Sánchezenvió una carta al presidente de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, que sigue las «justas» recomendaciones de los agricultores españoles. Bruselas, por su parte, se ha abierto a resolver determinadas exigencias medioambientales y ha reducido las inspecciones en el marco de un paquete de concesiones para presentar las protestas del campo.

Pero, entre todas las necesidades de simplificación y flexibilidad de la PAC, la carta de Sánchez a Von der Leyen introduce una Cable de bastón que va a los países en la tienda de Bruselas: los clubes específicos.. ¿Qué son y qué implican? Simplificando, son las condiciones de reciprocidad según las cuales los agricultores españoles o franceses piden ser incluidos en los acuerdos comerciales que la Comisión Europea negocia con tres pasos para que los productos importados se comporten con los mismos estándares, controles y regulaciones que exigen los agricultores. y agricultores que producen agua y evitan la jurisdicción de los desleales.

El ministro Planas también reconoció que «hay un problema de competencia en el sector primario». Si bien también admitió que, en estos momentos, no cuenta con el alcalde cualificado necesario en la UE para sacar adelante los clubes específicos. ¿Por qué todos los pasos son precisos? Sencillamente porque, incluso algunos, como España, Francia, Italia o Portugal, son claramente exportadores, otros, fundamentalmente los negros y los rojos, en particular Alemania o Dinamarca, son claramente importadores y, por tanto, no les interesa lo que es introdujo la reciprocidad en condiciones por las que no son grandes productores y por las que temas de representación en sus exportaciones de otros productos y servicios en partes de terceros países.

«Es un tema que creemos que podemos reiterar, pero obviamente no podemos terminar el próximo mes, porque es una cuestión que nos mantiene contentos», dice el ministro mientras planifica los últimos partidos. Como el dueño de Agricultura ya. Daba perderá el negocio, al menos, en estos momentos. Pero, ¿tiene España una opción real para introducir productos concretos en los acuerdos comerciales de la UE con terceros?

«Un callejón sin salida»

Se regula el margen de maniobra. “La idea de imponer cláusulas específicas para que el producto importado cumpla las mismas condiciones es muy buena, pero es completa”, afirma Tomás García Azcrate, médico, ingeniero agrónomo y economista especializado en la PAC. Los medios vegetales, principalmente, dos frentes: el sociotrabajadorEsto implica que los terceros pasos funcionan en las mismas condiciones laborales que en la UE, e los fitosanitarioslo que les exige el cumplimiento de la normativa de productos químicos y su uso sostenible.

«El primer ex a callejón sin salidaporque las condiciones laborales no son las mismas entre países de la UE, con grandes diferencias, por ejemplo, entre los salarios mínimos”, afirma el subdirector del Instituto de Economía, Geografía y Demografía (IEGD-CSIC). , en el caso de importar productos libres de residuos, «no tenemos ningún argumento jurídico ni fundamento jurídico», el reclama. «En el contexto de un rubro comercial, es posible pactar condiciones de acceso preferencial para determinadas importaciones, se deben cumplir una serie de requisitos, pero ello, si no hay otra calle sin sal, sin dudar de esta llegada», advierte el experto.

En el caso de los productos con residuos, España acude a la UE que, «cuando es necesario, para garantizar que no están autorizados en la UE, y la Comisión Europea no ha establecido el límite máximo de residuos, España, previamente, fijamos está en cero.» «Esto se puede plantear y existe la posibilidad de que, a la espera de que la decisión comunitaria, se pueda aplicar de forma unilateral provisional», avanza García Azcrate, quien considera que esta tarde «un paso pasable», aunque advierte de esto «planta un problema de libertad de movimiento en los mercados» y «es posible que las medidas de terceros sean represalias y entraremos en una dinámica de sanciones», como ocurre con Estados Unidos como consecuencia de la prohibición de importar carne envasada al vacío y tratada con hormonas.

En consecuencia, es difícil que los pasajes a favor de las empresas de Espejo Logren convenzan al resto de incorporarlo a empresas amigas como la Mercosur o los que están negociando con como pasos Chile, México, India, Kenia o Australia. Como admitió su propio ministro Planas, que acudió a Bruselas para buscar el paquete de indicaciones para los agricultores que deben ver la flexibilidad de la condicionalidad de la PAC y la simplificación de la burocracia. Concesiones que, en principio, no satisfacen a las organizaciones profesionales agrarias, que mantienen el impulso en las calles con un calendario de movilizaciones que se extiende hasta el mes de junio.