
El gobierno de México sigue adelante con su audaz objetivo de edificar un millón de casas en el presente sexenio, mediante el Programa de Vivienda para el Bienestar. Este plan tiene como finalidad responder a la creciente demanda de viviendas en el país, y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) ha informado sobre importantes avances en la preparación de terrenos para empezar a construir nuevas casas. Aunque para 2025 ya se cuentan con planes consolidados para 52,000 viviendas, aún hay siete estados donde no han comenzado las obras debido a pendientes en la verificación de la viabilidad de los terrenos.
El Gobierno mexicano avanza en su ambiciosa meta de construir un millón de viviendas durante el sexenio actual, a través del Programa de Vivienda para el Bienestar. Este proyecto busca atender las crecientes necesidades habitacionales en el país, y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) ha reportado avances significativos en la preparación de terrenos para iniciar la construcción de nuevas viviendas. Aunque en 2025 ya se han formalizado los planes para 52,000 casas, todavía hay siete estados donde las obras no han comenzado debido a pendientes en la verificación de la factibilidad de los terrenos.
Durante todo el año, se anticipa la construcción de aproximadamente 125,000 casas, que complementarán los esfuerzos de otras entidades como la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), la cual también contribuirá con al menos 50,000 viviendas. Este número apunta a cumplir con la meta anual y a colaborar con el objetivo global del sexenio, que contempla edificar 500,000 viviendas mediante la Conavi y otras 500,000 a través del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
El efecto económico de este programa es notable. Se calcula que las 52,000 casas que se proyecta construir en los primeros meses de 2025 crearán aproximadamente 235,000 empleos directos y 353,000 indirectos, lo que tiene un gran potencial para impulsar las economías locales. Además, el programa de nuevas viviendas integra un componente significativo de mejoramiento habitacional, con el propósito de ayudar a familias que actualmente habitan en condiciones precarias.
El Gobierno también se está enfocando en mejorar el acceso a la vivienda para la juventud. Se prevé que alrededor de 10,000 de las viviendas de este año se orienten hacia esquemas de alquiler, lo cual ofrecerá a los jóvenes la posibilidad de habitar en un hogar adecuado mientras ahorran para adquirir una propiedad en el futuro. La puesta en marcha de estas políticas de vivienda forma parte de un esfuerzo mayor para enfrentar el déficit habitacional del país y elevar las condiciones de vida de las poblaciones más vulnerables.
El Gobierno también está poniendo especial atención en el acceso a viviendas para los jóvenes. Se estima que aproximadamente 10,000 de las viviendas de este año estarán destinadas a esquemas de renta, una opción que permitirá a los jóvenes tener acceso a una casa digna mientras ahorran para adquirir una propiedad en el futuro. La implementación de estas políticas habitacionales es parte de un esfuerzo más amplio para abordar el déficit de vivienda en el país y mejorar las condiciones de vida de las poblaciones más vulnerables.
El impacto de estos proyectos no solo es social, sino también económico, ya que fomentan la construcción y la inversión en infraestructura, lo que mejora las condiciones de los mercados locales y de empleo. Con la esperanza de resolver los últimos obstáculos para comenzar la construcción en las siete entidades faltantes, el Gobierno mexicano sigue adelante con sus planes para cerrar el año con un fuerte avance en el cumplimiento de sus metas habitacionales.